Perfumes Florales

Los perfumes florales son aquellos en los que las flores son las grandes protagonistas. Ya sea con una sola flor destacando (soliflor) o una mezcla armoniosa de varias (bouquet), estas fragancias transmiten frescura, romanticismo y un aire natural que las hace irresistibles. Son clásicamente femeninas y suelen estar asociadas a la primavera y a la delicadeza de la naturaleza.

Características destacadas de los perfumes florales:

Notas florales principales:
Rosa, jazmín y neroli lideran el grupo, aunque también encontramos lirio, peonía, azahar y muchas otras que aportan matices únicos.

Versatilidad olfativa:
Pueden ser livianas y frescas para el día, o profundas y envolventes para la noche. Todo depende del tipo de flor y su combinación con otras familias aromáticas.

Gran variedad de estilos:
Existen versiones florales tanto para mujer como para hombre, adaptadas a diferentes personalidades, desde lo sutil hasta lo sofisticado.

Conexión emocional:
Evocan emociones como alegría, ternura, elegancia, nostalgia o sensualidad, lo que las hace perfectas para crear un sello personal.

Tipos de perfumes florales:

• Soliflor: Fragancias centradas en una sola flor, como la rosa o el jazmín.

• Bouquet floral: Combinación de varias flores que generan una composición rica y armoniosa.

• Florales frescos: Incluyen notas cítricas, frutales o acuáticas, ideales para un efecto liviano y natural.

• Florales clásicos: Más intensos y complejos, con tuberosa, narciso o azahar como protagonistas.

• Florales con cuerpo: Se fusionan con notas amaderadas o afrutadas, dando como resultado perfumes más cálidos y sensuales.

En resumen:
Los perfumes florales forman una de las familias olfativas más queridas y versátiles. Perfectos para quienes buscan un aroma que combine belleza, frescura y carácter, ofrecen opciones para todos los gustos, desde lo sutilmente romántico hasta lo intensamente elegante.